Cada año, es recomendable revisar los gastos y ajustar presupuestos, así como analizar las pólizas de seguro. 

Sin embargo, a raíz de la inflación, las pólizas de seguros han experimentado un aumento en sus precios para hacer frente a pérdidas declaradas en distintos ramos del sector asegurador y nos encontramos en la situación que ni siquiera se puede mantener el precio del año anterior a alguien que no ha tenido un siniestro.

El incremento de costes en general, la revalorización de capitales necesaria en estos momentos de inflación al alza, así como la alta siniestralidad debida a factores como fenómenos atmosféricos producidos por el cambio climático, han contribuido a esta situación.

Es un momento complicado para los consumidores y las empresas, ya que anteriormente existía una infinidad de alternativas para reconducir alguna subida. 

En la actualidad esta situación ha cambiado e incluso nos encontramos con empresas que se enfrentan a la posibilidad de no encontrar aseguradoras dispuestas a cubrir sus riesgos. 

En casos extremos, algunas compañías han optado por dejar de asegurar ciertos negocios, generando una preocupación adicional en el entorno empresarial. Por eso, el contacto con un corredor de seguros es muy necesario.

Sin embargo, gracias al trabajo que desarrollamos en Riesgo Cero, podemos seguir favoreciendo a nuestros clientes suscribiendo sus pólizas en compañías de primer nivel, revisando sus riesgos y precios cada año adaptándonos a las necesidades y características particulares de cada cliente.